Una práctica guiada de 10 minutos
Observa puntos de contacto con el suelo y la silla. Suelta hombros. Toma tres exhalaciones más largas. Esta llegada consciente establece la base para que la práctica de atención plena sea clara y accesible hoy.
Una práctica guiada de 10 minutos
Elige fosas nasales, pecho o abdomen. Cuando surja un pensamiento, etiqueta suavemente “pensando” y vuelve. No te regañes. Cada regreso refuerza el músculo central de la meditación de atención plena cotidiana.